Mientras en otros escenarios la gente disfrutaba entre perreo y «como no te voy a querer» en la Hospedería Del Real Monasterio De San Benito de Valladolid, se podía disfrutar del buen gusto y de MÚSICA con MAYUSACULAS, porque sí, tenemos que respetar todos los gustos, pero tenemos que sacar pecho, porque el Rock (en todas sus variantes), esta en la cima y nos podemos permitir mirar por encima del hombro al resto…
La música negra, el Blues, también han tenido su pequeño espacio dentro de estas fiestas de la ciudad. El Festival Black & Blues, reunió en este coqueto patio a un par de bandas; por un lado los vitorianos The Allnighters y a los que corresponden las fotografías,Los Saxos del Averno, un amplio combo que, desde las profundidades de un supuesto inframundo, para los griegos y los romanos, nació como banda que acompañaba a grupos de alto voltaje como Ginferno, con el que editaron un 7 pulgadas «Creepy Cloud» (2012), The Limboos, Pájaro, Julián Maeso o Vinila Von Bismark, antes de su pase al lado oscuro de la música o descenso a esos infiernos, según se mire.
Cuentan con un trabajo editado “Roasted Sinner” (2017), trabajo con el que decidieron «ascender del Averno para consolidarse como banda independiente y hacer su propia música»…algo que clasifican como, «una suerte de R&B cavernoso, flambeado con toques latinos y altas dosis de Jazz para caderas inquietas».
Seis músicos con una larga y reconocida trayectoria detrás de ellos, y que responden a los nombres de Dani Niño, al saxo barítono; Ariel Brínguez, con el saxo tenor; Luis Verde, al saxo alto; a los que se unen, Juan Carlos “Chavi” Ontoria, órgano Hammond y piano; Miguel Benito “Pete” a la batería, junto al bluesman gallego, Adrián Costa a la guitarra y voz. Todos ellos, como ya comente, cuentan con un reconocido prestigio y han colaborado con gente, al margen de la citada, como, Shirley Davis, Freedonia, Xoel López, Niño Josele, Jerry González o Chucho Valdes, entre otros muchos.
Alejado de los escenarios principales, este festival en esta segunda edición se afianza como una propuesta llena de vitalidad dentro de una programación que siempre tendrá sus detractores pero, que en el peor de los casos, no deja de lado a casi ningún estilo, seamos o no, partidarios de ellos.
Un estratosférico combo donde los saxofones tienen una presencia fundamental que bajo el sobre-nombre de Los Saxos del Averno, nos ofrecieron una noche mágica de soul y mucho swing, dentro del Festival Black & Blues, en el Patio de la Hospedería de San Benito, un recinto donde la gente no se quería ir de lo que estaba disfrutando con la banda, dentro de la programación de las Fiestas de Valladolid 2022 el pasado 9 de Septiembre…y sí, Ana de Armas, está espectacular.
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