Corría la mitad del año 2000 y una banda, con reminiscencias de satélite metereológico, Meteosat nos hizo rompernos las caderas con su tema Wilma….no se si toman a esta banda como referencia o es un homenaje al personaje femenino de Los Picapiedras, pero Vilma, la versión eléctrica de la cantautora vallisoletana Andrea Garcy, tiene todos los argumentos para poder ser una de las mejores bandas de esta ciudad en los próximos años.
Se mueven entre sonidos de soul-rock o funky, y, así en plan sorpresa, pueden presumir de haber ganado la última edición del certamen OndaRock el pasado año 2019. Andan preparando su primer trabajo, ya en un estado muy avanzado de gestación, y Los Conciertos Salvajes, ese “peligroso” ciclo que ha sido y será un revitalizador de la cultura musical de esta ciudad, ha sido, dentro de esta “nueva” normalidad que vivimos, el lugar elegido para presentarlos.
A estas alturas y visto los desmadres que existen en otros sectores (y sí, me refiero explícitamente a esa hostelería que llora, aunque ha ocupado media ciudad, pero que a día de hoy, 19 de Junio de 2020, tiene pendiente un convenio colectivo con sus trabajadores desde hace unos cuantos años), pocos lugares existen más seguros, dentro de lo que se puede entender por una seguridad razonable, como un espectáculo, sea musical, teatral, o de cualquier otra especialidad artística, como este que organizo la gente responsable de este ciclo….un aforo al aire libre muy reducido, una plaza donde caben alrededor de 700 personas limitado a 100, todas sentadas y separadas; registro de nombre y número de teléfono para prevenir posibles seguimientos, geles y si te tomabas una cerveza te la acercaban, amablemente, a la mesa….me reafirmo pocos sitios más seguros y La Junta y la gente encargada del tema de la Cultura, si existe alguien que se encargue de eso dentro de la comunidad, tendrían que tomar buena nota de esta gente y reflexionar que la CULTURA no solo se apellida Gabarrón.
En esta ocasión y rompiendo esa línea a la que nos tienen tan acostumbrado las bandas locales con esa devoción infinita hacia los popes del Indie nacional (se nota que no me gustas nada de nada), “Sargento de Hierro” de los madrileños Morgan (sí o sí, la BANDA); el clásico “Back To Black” de la añorada Amy Winehouse, a pesar de que Andrea no se haga la línea de los ojos como ella y una tercera versión que se me escapo, se unieron a un repertorio notable y que deja muy buenas sensaciones y, desde luego, mucha ganas de más, ganas de volver a reencontrarnos con una de las bandas más prometedoras que tiene esta ciudad.
Vilma no solo es Andrea Garay, una chica pequeña de altura pero con una sonrisa enorme, a la voz, es una súper banda integrada por: Jorge Casasus a la guitarra; Víctor Vaquero a la batería; Pablo Wisky Useros a los teclados y armónica junto a David Gómez al bajo.
Una interesante formación que presenta una nueva visión de su protagonista muy a tener en cuenta.
Vilma inauguro esta nueva normalidad el pasado día 18 de Julio de 2020 en la irreducible Aldea de San Miguel, organizado en esta ocasión por los responsables del Ayuntamiento de la pequeña población, ayudados por los responsables de ese memorable ciclo que responde al nombre de Los Conciertos Salvajes.