Más o menos puntual, con una Plaza de Toros prácticamente llena (según la prensa local alrededor de 4.500 personas, aunque la manera de contar de la prensa, a veces, deja algo que desear) el artista almeriense, sobre un escenario luminoso y colorido, siguiendo la norma no escrita en este tipo de espectáculos, con los integrantes de la banda colocados al fondo del escenario, todos de riguroso negro, no sea que restemos protagonismo a la estrella, al fin y al cabo los músicos pueden ser perfectamente prescindibles, si uno de ellos por enfermedad o lo que sea tiene que dejar la gira en 24h seguro que tendría un sustituto rápidamente; uno de los pocos , junto a Bustamante superviviente de la generación de Operación Triunfo (si acaso podemos meter en este saco a Chenoa, más dedicada por el momento al mundo de la televisión que al de la música), porque. seamos sinceros, alguien se acuerda de algún nombre más, y eso que solo hablamos de la primera edición que si avanzamos a las posteriores, entre todas no sacamos ni dos o tres….conquisto, con su sola presencia la Plaza de Toros de Arroyo. La verdad es que de entrada lo tiene fácil, cuando desde el viernes con cuarenta grados a la sombra tienen a un número importante de fans llegados de Málaga, Gijón, Lugo o Toledo, esperando la apertura de puertas para coger un buen sitio ya tiene la mitad del concierto ganado. Dicen sus seguidores que su nuevo trabajo, llamado «Hijos del Mar»(2016), sexto álbum en su carrera, es un proyecto muy personal, el cual significa un giro en su estilo musical que, a pesar de los nuevos sonidos, sigue manteniendo la esencia que lo ha hecho reconocible internacionalmente. Más o menos elegante, pero siempre con la sensación de todo demasiado controlado, movimientos, gestos expresiones….y mucha, mucha pose, donde no falto algunos de esos movimientos que son parte de sus señas de identidad, arranco todo con ‘Mi norte es tu sur’, ante un público entregado que durante las más de dos horas de concierto no paró de corear sus canciones, eso si, con un sonido penoso….aunque esto último (puede que en la practica, lo más importante de un espectáculo en directo) no importo mucho, ni a los cientos de fans que se deshacen en mensajes sobre la grandeza de su ídolo, ni a la prensa que ni lo insinúa. Dos horas largas de conciertos, para muchos el concierto de su vida, para alguien, en absoluto seguidor, uno más de un músico descendiente de una generación televisiva que exploto, y que genero (y genera), pingües beneficios y que como tal se ha estitrado hasta la extenuación pero que por mucho que quieran venderlo, aunque en su nuevo giro cuente con el nombre de gente como Antonio Orozco, Pablo López o Vega, el poso que dejara en la historia dorada del pop nacional solo se traduce en números….aunque para muchos parece ser suficiente.
David Bisbal actuó el pasado día 18 de Junio de 2017 presentando su «Hijos del Mar Tour 2017» en la Plaza de Toros de Arroyo de la Encomienda, Valladolid.