Hace treinta años, Valladolid no era un erial literalmente, pero tampoco era un campo de flores, musicalmente hablando. Discos K, entre otros, o salas como La Riviera, la Sala Hipo…el 4deStar de Zaratán, mantenían encendida la llama del rock and roll. The Sinner, Ramones, Iggy Pop y por supuesto los enormes The Del Lords, en uno, sino el mejor concierto que ha vivido esta villa en su historia, nos visitaron gracias al esfuerzo y el interés de gente a la que debemos mucho; pero fue este Valladolindie, este pequeño y simple festival de nombre infinito «El Festival más largo del mundo» el que acercó y nos enseñó formaciones que de otra manera habrían pasado de largo de esta ciudad, por entonces cuna de fachas y salva patrias.
Treinta años después sigue acercando a bandas y poniéndonos al día de lo que se cuece fuera de estas calles, con una programación que incorpora una parte «alimenticia», con bandas con reconocimiento que ayudan a hacer caja y mantener vivo un sueño y otra, la más interesante, sin lugar a dudas, donde vuelve a acercar a formaciones o artistas que de otra manera esquivarían los pocos escenarios que todavía conservamos.
Ken Stringfllow es uno de estos artistas de culto que dan lustre a cualquier festival o iniciativa. Figura central en el panorama de la música indie desde que formó su banda The Posies en 1988, en la primera ola de bandas que emergieron en la escena legendaria de Seattle de la época, y que nos visitó en un pasado, en 1994 en la Sala Mambo, gracias a este Festival, en un caótico concierto donde «llegaron borrachos como una cuba, hicieron un concierto brutal, casi amateur…y llegaron a probar sonido una hora después de la hora en que estaba previsto el concierto», aunque los recuerdos del músico de Hollywood, California, difieren en alguna manera de lo vivido.…sin olvidarnos, según cuentan, que se llevaron los micrófonos….y a la que volvió en el 2017, en esta ocasión a la Sala Porta Caeli; e integrante de Big Star y de la banda indie, puede de cuando ese adjetivo tuviera algo más de significado que en la actualidad, más influyente de todos los tiempos, R.E.M.
Después de la disolución de The Posies con algún que otro claro oscuro, anda presentando su último trabajo en solitario «Circuit Breaker» (2024), su quinto trabajo, acompañado de su guitarra y de un piano. Un trabajo complejo y compuesto con el corazón, lleno de partes crudas y momentos tiernos. Cuenta en una entrevista que «echa de menos esos tiempos de los 90 llenos de desenfrenos…la libertad de esos años», «la confianza con la que hombre y mujeres vivían» añade. Con los años ha abandonado esa etapa de locura y desenfreno y se ha centrado en un universo más zen, «irradiando emociones que no habría comprendido a los 26 años en 1995», cuenta. Pleno de una realidad y de un equilibrio que ha recuperado anda inmerso en la promoción de este nuevo trabajo y anuncia un álbum de su antigua formación que acabaron en el 2021…y es que todo el mundo merece una segunda oportunidad, o por lo menos casi todo el mundo, no nos pasemos de ser zen.
Ken Stringfllow, ofreció un concierto íntimo entre sombras y sonidos sugerentes dentro de la programación de esos 30 años del Valladolindie, «El Festival más largo del mundo», en un Café Teatro, otro de esos pequeños reductos de la música local en pasado 8 de Abril de 2025 en Valladolid.