Una nota en la prensa anunciaba su presencia en Peñafiel, al llegar allí, unos carteles señalaban su concierto junto a DeLafe y las Flores Azules, y otros les colocaban como únicos interpretes, es lo mismo, la noche prometía…al llegar a la Plaza de los Comuneros unos momentos antes de la hora señalada, la visión fue algo decepcionante, poca gente, grupos familiares sentados en torno a los bancos y una familia de extranjeros con apariencia de despistados; la sensación de que si no das a la gente pachanga y toros la gente no responde, pero esto es el país en el que nos toca vivir. Al final mejor, si la gente no sabe apreciar lo bueno, ellos se lo pierden. A la hora señalada apareció sobre el escenario con su banda todos vestidos con monos de currantes, currantes de la música, que al fin y al cabo son lo que son; y directamennte al tajo. Concierto rotundo, breve, una hora justa, pero de lo mejorcito de este verano donde Kiko mostró lo que mejor sabe hacer, canciones pop de cotidianidad brutal; pícaras, desnudas e irónicas. Concierto casi intimo, aunque al final la plaza se fue animando y congrego a un buen número de espectadores, que contó con la aparición sobre el escenario, mediado el concierto de Jabier Muguruza con su acordeón, con el que compartio un tema.
Sonido brillante que se fraguo en un repaso a sus temas clásicos del que no falto ese «Joselito» de regalo, al final, «a capella, que sonó a gloria y que nos puso la piel de gallina.
El concierto fue el 11 de Agosto de 2014, en la Plaza de los Comuneros de Peñafiel (Valladolid).