De musa de todos los Indies nacionales a navegar por su escenario más propio; teatros y auditorios, donde un publico más tradicional estalla en aplausos solo con verle asomar sobre el escenario. Un público más cercano a la edad del músico pero con abundancia de personas de generaciones posteriores e incluso alguno de sus hijos o nietos…eso si, con un cierto nivel adquisitivo, porque las entradas entre 30€ y 80€ no eran actas para todos los bolsillos. Nunca he sido un gran seguidor de este artista, pero se tiene que reconocer que a sus 73 años, sin duda, la huella que ha dejado en «esto» de la música nacional es muy profunda. Su nuevo proyecto, «Sinphónico», pasó por el Auditorio Miguel Delibes con las entradas agotadas ya desde hace aproximadamente un mes, el pasado día 11 de Diciembre de 2015, donde a lo largo de «casi» 3 horas de actuación desgrano una buena parte de su repertorio, pero en esta ocasión dirigido, más bien, a sus fans más fieles, que sin duda son muchos, acompañado o más bien respaldado por una orquesta sinfónica, que dicho sea de paso, “ennoblece” sus grandes éxitos, en este caso la de Castilla y León, pero que en otras localidades es reemplazada por la orquesta local. Salida triunfal, donde los aplausos, ya indicaban el devenir del concierto para un músico, que con todo hecho, se sigue reinventando día a día, que afirma que «tiene mucha ilusión por las cosas. Me gusta lo que hago y soy un apasionado. Me levanto por la mañana y digo: qué bien, tengo muchas horas para hacer cosas»; y que ante la pregunta de hasta cuando seguirá responde: «Pues mira: eso nunca se sabe. Puede ser dentro de 20 años, dentro de 12 o puede ser mañana. El día que note que no estoy en condiciones, que no estoy en lo que estoy, pues ese será el momento. Pero no diré que me retiro. Porque me echarán las circunstancias. Y entonces, lentamente, dejaré de hacer discos y de dar conciertos y ya está. Pero sin hacer gira de despedida como otros. Yo no. No voy a hacer lo que sé que no voy a cumplir. ¿Cómo me voy a retirar yo? A mí me tienen que echar. Para mí esto es mi vida, es mi destino, es todo».