Irakere es, entre otras cosas, una escuela de estrellas, donde se mezcla la cultura española, la africana y, especialmente, la propia personalidad desarrollada en la Isla de Cuba. Como formación puede ser considerada el mayor exponente del Jazz Latino. «Son parte del legado y la esencia de esa mítica banda en la que estuvieron Paquito D´Rivera, Chucho Valdés o Arturo Sandoval«, señala José Luis Gutierrez, jugando con la idea o los sueños de que Dizzy Gillespie durante una visita a La Habana se subió a un taxi donde el conductor esa Arturo Sandoval, y de ese encuentro casual surgió ese Jazz Latino que ha conquistado a medio planeta.
La formación cumple medio siglo de vida, 50 años, donde se involucraron en una época «de cambio cultural» en Cuba, y en Valladolid, en este XXII UniversiJazz, convertido ya en una cita imprescindible para los amantes del jazz, sobre el nuevo escenario se pudo ver y disfrutar de músicos como Julito Padrón, trompeta y voz; Carlos Sarduy, trompeta, voz y congas; Carlos Miyares, saxo tenor; Héctor Quintana, guitarra; Miguel Ángel «Wiwi» García al piano; Yandy Rodríguez, bajo y contrabajo; Adel González, congas y Rodney Barreto a la batería, a los que se sumó Claritzel Miyares a la voz y piano.
Irakere, con esa reunión de nueve maestros que han tocado en la mítica banda, y que significó «un antes y un después en la música cubana», participó, en un concierto específico para esta programación, algo bastante inusual, en esta XXII Edición del UniversiJazz, en el Patio del Colegio San José de Valladolid, el pasado 17 de Julio de 2024.